Llegando tarde a clases [libre]

Al termino de la clase de transformaciones me separe del grupo para hablar civilizadamente sobre una nota con la profesora, mi madre había insistido en que intentara hacer que subiera, a su parecer era un buen trabajo, la verdad era que no le había comentado que la nota baja era realmente como castigo por haber convertido una babosa en una cucaracha gigante y la arroje accidentalmente contra uno de los chicos de Slytherin, lo cual no termino muy bien.

Después de aclarar el mal entendido me apresure a correr a las escaleras, tenía que recorrer medio castillo para poder llegar a mi clase de herbología si no llegaba temprano tendría que soportar un castigo y seguramente otro sermón departe de mi madre sobre lo importante que es llegar temprano a clases, cuando estaba a media escalera cuando comenzó a moverse, no quería esperar a que volviera a regresar a su sitio, camine tratando de buscar otro camino para bajar.

- Derecha o izquierda – me quede frente a un pasillo, había lugares que todavía no conocía muy bien, intente regresar por donde había llegado pero ya no había escalera - ¡Genial!

Estaba de camino al gran comedor, por fortuna tenia una clase libre, lo cual era realmente un aliviio para mi, me sentia algo cansada y tenia bastante sueño.
avanzaba distraidamente por los corredores cuando vi a alguien conosido.
-que es genial?- pregunte mientras me acercaba con una gran sonrisa- Hola, paraces apurado, estas bien?- hable rapidamente mirando la cara que tenia pintada mi primo.

Trate de disimular que todo estaba en orden cuando en realidad la voz que se escucho de repente detrás de mi hizo que pegara un salto, jamás me acostumbraría a que los fantasmas salieran de la nada entre los pasillos y mucho menos que no respetaran tu privacidad. Por suerte era Roxanne y no un fantasma.

- Es genial que vaya a estar castigado hasta la siguiente semana - di unos cuantos pasos para poder acercarme hasta donde estaba – Voy algo tarde a mi clase.

Ya podía ir imaginando lo que me diría el profesor Longbotton, él problema no eran sus palabras por lo regular siempre sonreía cuando te castigaba, el problema sería cuando mi madre se enterara y fuera ella quien tomaría la decisión final sobre mi castigo.

- Creoqueestoyperdido – hable muy rápido no me gustaba aceptar ese tipo de cosas frente a mis primos.